Dos años después de los sucesos acaecidos en El Caballero Errante, Dunk y Egg siguen deambulando por los caminos. Los Siete Reinos están en pleno caos. Una Gran Epidemia ha matado a cientos de miles de personas, entre ellos al Rey Daeron Targaryen. Como su hijo mayor Baelor, murió, el trono será para rey Aerys I de la casa Targaryen, quien en la práctica cede el gobierno a su Mano, su tío Brynden Ríos también conocido como «Cuervo de Sangre».
Dunk y Egg buscan casa y señor a quien servir y llegan a Tiesa donde entran al servicio de Ser Eustace Osgrey, en perpetua disputa con sus vecinos, la Casa Webber de Fosafría, una fortaleza mucho más grande, gobernada por la temible Lady Rohanne, a quien llaman La Viuda Roja, por lo poco que le duran los maridos.
Lady Rohanne ha construido una presa en el río Osgrey, lo que hace que el agua no llegue a hasta los terrenos de la casa Osgrey que padrece una gran sequía que lo está empobreciendo velozmente. Dunk y Egg, deben lealtad a Ser Eustace y se dirigen a negociar con Lady Rohanne con riesgo de perder su propia vida. Pero allí a lo que se enfrentarán a un drama repleto de humanidad que Dunk deberá tratar con sumo cuidado y elegante maestría, pues no es sólo el agua lo que separa a las dos nobles casas.
Esta historia tiene menos brío o el desarrollo de la acción es menos acelerada que la anterior, pero me ha gustado más. Es más tranquila pero muy intensa. No obstante, creo que me voy a plantar aquí de momento.