Hace unos meses publicábamos en este blog la reseña de la novela Celos de Dios, de Gema Alcalá, una madrileña que por aquel entonces hacía su primera incursión en este difícil mundo de la literatura relatándonos con gran sencillez y habilidad una extraordinaria historia que nos fascinó desde el principio.
Hemos querido conocerla un poco más, para poder presentaros con más conocimiento a esta promesa de nuestra literatura.
Lo primero de todo, queremos agradecer a Gema el tiempo que nos ha dedicado, y la amabilidad con la que ha contestado a todas nuestras preguntas.
Y esto es lo que nos ha contado. Os dejamos con la entrevista, qué la disfrutéis.
Hola Gema. Sabemos, por lo que nos cuentas en tu libro, que esa “vena” artística y literaria necesaria para afrontar un reto como éste, te viene de familia. También sabemos que esta novela, aún siendo tu ópera prima, no es tu primera experiencia como escritora, puesto que has escrito varios textos teatrales que han sido llevados a escena, pero nos gustaría saber algo más de ti, por ejemplo,
– ¿Cómo te ganas la vida? y, por favor, no nos juzgues indiscretos, sólo queremos saber si tu vida profesional gira en torno al mundo artístico, o si por el contrario es sólo una afición a la que dedicas tu tiempo extra.
R: Durante diecisiete años he estado trabajando como administrativa compaginándolo con mi afición a la música y a la literatura en mi tiempo libre. Recientemente debido a la enfermedad que padezco, esclerosis múltiple, se me ha reconocido una incapacidad que me permite dedicar más tiempo a esta inquietud, no todo el que quisiera porque físicamente estoy algo limitada, pero sí el suficiente como para dar rienda suelta a la imaginación y no caer en el desánimo.
– ¿Desde cuándo llevas escribiendo guiones teatrales?
R: Desde que aprendí a escribir. Antes de saber componía canciones (letra y música), cuentos y poesías que memorizaba para mostrar a mi público, de quien siempre recibía buenas críticas, como es lógico tratándose de la familia y amigos. Lo mejor de tocar varios palos es que siempre estoy entretenida. Los guiones teatrales por ejemplo, disfruto tanto escribiéndolos que el tiempo que empleo se me hace brevísimo y la diversión dura poco, de manera que a veces, compongo la música para convertirlos en musicales.
– ¿Has escrito algún otro tipo de textos, como relatos o cuentos? Incluso me atrevería a preguntarte ¿no tendrás alguna novela por ahí escondida que no hayas querido sacar a la luz?
R: Sí, he escrito bastantes relatos, algunos incluso me han dado la satisfacción de un premio. Tengo una novela inédita, no por nada en concreto, sino porque tendría que revisarla entera y me da muchísima pereza. El lector merece todo mi respeto y no puedo permitir que por mi parte, le llegue algo poco cuidado. Probablemente se quedará guardada en el cajón ya que otras historias ocupan mi cabeza y sería una pérdida de Tiempo retomarla. Aunque a veces me resulte paradójico, considero que vivir en el pasado es no comenzar nunca.

Gema y su libro Celos de Dios
Ahora que ya te conocemos un poquito más, pasemos a hablar de tu novela,”Celos de Dios”.
– Cuéntanos, ¿cómo surge este libro, y qué fue lo que te motivó a escribirlo?
R: Hace unos años, cuando conducía de noche por la M-521 hacia Quijorna, al pasar por un punto concreto de la carretera, empezaba a oler fatal, como a podrido. Me pareció muy curioso que todos los días sucediera esto a pesar de tener las ventanillas del coche cerradas. A menudo mi cabeza va más allá de lo lógico y me paso de fantasiosa. No lo considero una virtud, pero me puede y me resultó inevitable orientar el suceso hacia una perspectiva paranormal. Me informaron de que el “mal olor”, técnicamente denominado como osmogénesis, únicamente se da en algunas casas encantadas y rara vez en posesiones demoníacas, pero nunca en lugares exteriores. Después de comprobar que no se me estaba pudriendo nada en el coche, supuse que el motivo del mal olor sería porque pasaría por una zona en donde había nitratos, materia orgánica en descomposición o algún animal muerto. A pesar de esto, para mí resultó ser un material valiosísimo para comenzar a desgranar una historia. Resultó curioso que hasta que no tuve la novela encaminada, el mal olor continuó invadiendo mi coche cuando pasaba por ese lugar.
– Tras su lectura me quedé con las ganas de saber qué parte de ficción y qué de realidad tiene la historia principal, la que tiene como protagonista a Lina. ¿Serías tan amable de solventarme esta duda?
R: A partir de los episodios de “osmogénesis”, que fue lo que me alentó a escribir un relato más amplio de lo normal, me pareció especial incluir un hecho que narraba mi abuela. Nos contaba que su tío Miguel apostó con sus amigos que se casaría con la mujer más rica del pueblo que era además un tanto… especial: Lina. Este acontecimiento es lo único que tiene de real “Celos de Dios”, la historia que se desarrolla a continuación es absolutamente ficticia, bueno, menos la estúpida guerra que lamentablemente es real.
– ¿Tiene algo de autobiográfica la narración?
R: No, en absoluto. Como dije antes soy muy respetuosa con el lector y no considero que mi vida sea tan especial como para que alguien se entretenga leyéndola.
– Cuando reseñé tu novela en el blog comenté que tenía la impresión de que Bordecillo de las Mieles, el pueblo ficticio donde se desarrolla gran parte de la trama del libro, estaba inspirado en Quijorna, el lugar donde resides actualmente ¿Tengo razón o es sólo una suposición mía?
R: Hace poco me mudé a vivir a Madrid capital, pero efectivamente Bordecillo de las Mieles es mi querido Quijorna. Quijorna es un lugar muy tranquilo y muy bello, plagado de historias.

Quijorna: Iglesia de San Juan Evangelista
– Además de haber residido allí ¿hay algún lazo especial que te una con ese pueblo para que haya sido fuente de inspiración?
R: Por el hecho de haber residido aquí, he incorporado muy buenos amigos en mi vida con los que además he llevado a escena un par de obras musicales, pero la verdadera fuente de inspiración me ha venido directamente de este lugar al que considero mágico.

Quijorna: Restos de la Guerra Civil
– Y por último, dinos, ¿qué es lo que esperas de esta primera novela tuya?
R: Aprender qué es lo mejor que puedo ofrecer de mí para continuar trabajándolo.
No podemos finalizar esta pequeña entrevista sin que nos cuentes algo sobre tu próxima novela, que según tenemos entendido ya has terminado de escribir.
– ¿Qué es lo que nos vamos a encontrar entre sus páginas?
R: La historia empezó a saltar por mi cabeza a partir de un telediario que fue especialmente desagradable: violencia, muertos, lágrimas. No es que se me ocurriera escribir sobre un tema así, no podría hacerlo soy demasiado romántica y optimista, pero sí pensé en inventar un argumento que diera con la fórmula para acabar con el odio: una utopía. Lo más importante es que el lector tenga siempre ilusiones y esperanzas y sobretodo que le haga pensar.
– Aunque supongo que no nos puedes desvelar muchas cosas, al menos dinos ¿Se puede saber el título?
R: Sí, el título se abrió paso apenas terminó el telediario que comenté antes. Se llamará: “La empatía del centauro”. ¿Por qué ese título? Antes de leer el libro será imposible averiguarlo, pero después de hacerlo, el lector creerá que no se podía llamar de otra forma.
– Esperamos pronto disfrutar de su lectura, ¿para cuándo tienes previsto que vea la luz?
R: Ya está en proceso de edición, espero que antes de que acabe el año. En cualquier caso, os prometo que seréis los primeros en saberlo.
Gema, sólo nos queda darte las gracias por habernos dedicado un ratito de tu tiempo para contestar estas preguntas, y, por supuesto, desearte todo el éxito y la suerte del mundo, no sólo con tu primera novela, sino con todas las que vengan después.
R: Gracias a vosotros por vuestro apoyo y por vuestra valiosa dedicación a la Literatura.