RSS
Entradas
Comentarios

Diario de un zombi, de Sergi Llauger

Diario de un zombi, de Sergi Llauger

(Ver Leyendo-Ficha Técnica)

Conseguí terminarlo y al final le voy a dar una nota bastante aceptable (creo), pero de emoción y flipes y de hincharme a llorar tal y como algunos me aseguraban, nada de nada. Será que tengo un corazón de piedra.

Es un original relato de zombis, eso hay que reconocerlo, con un no-muerto que no lo es del todo y con una niña pequeña que entabla amistad con él. La niña tiene una misión que cumplir y el medio-zombi la ayuda a realizarla acompañándola hasta su destino y protegiéndola de todos los peligros que les acechan.

La primera parte, cuando el protagonista está solo y cuando se encuentra con la niña, resulta bastante aburrida y sin gracia. Pretende ser un personaje duro, irónico, sarcástico, de vuelta de todo, mordaz, despechado y cínico, pero no resulta creíble. No me parece que el personaje esté muy bien construido. Aquí fue donde me atasqué. Fueron sólo 77 páginas, pero muy duras de leer, lentas, con la información algo desordenada  y sin demasiado interés.

Luego empieza la acción de verdad, cuando parten desde Barcelona hacia algún lugar del Pirineo francés. Es aquí, más o menos, cuando he vuelto a coger su lectura después del primer abandono.  Es en este periplo lleno de aventuras, a cual más insospechada y peligrosa, encontrándose con todo tipo de seres diferentes, con diferentes intereses (pero todos éstos pasaban por cargarse a nuestros protagonistas), cuando el libro se pone interesante y ameno.

Durante este viaje el no-zombi/no-hombre/no-muerto/no-vivo, muestra una personalidad más “normal” (entiéndase normal dentro del concepto zombi), y su evolución es más interesante y creíble. Puedes llegar a empatizar perfectamente con él, pensando en qué harías tú en tal o cual situación o frente a este o aquel problema, puesto que no nos lo presentan ni como un monstruo ni como un superhombre, es simplemente un no-muerto que no ha completado su paso de hombre a zombi, con características de ambos seres y sin ninguna habilidad especial o extraordinaria que se saque de la manga para resolver situaciones difíciles.

Otra cosa que me gustó de la novela es que la acción empieza y acaba, esto es, tiene un principio, la infección zombi y un final que, evidentemente, no voy a contar. Y además este final es fantástico, puesto que de fantasía hablamos (os recuerdo que los zombis no existen), pero razonable o posible. No parece que haya pretendido dejar la puerta abierta a futuras segundas partes.

Discrepo con César en cuanto a la calificación de la novela, pues a mí no me ha parecido maravillosa, sino leíble sin más y me reitero en el problema de las 70 u 80 primeras páginas del libro, pues no todo el mundo insiste en seguir leyendo cuando el libro no te atrapa desde el principio. Posiblemente sin ese principio mi calificación hubiera sido más alta, aunque creo que no me he portado demasiado mal al darle la nota y esto ha sido porque ha mejorado con el transcurrir de las páginas. Tarde, pero ha mejorado.

No sé si es el primer libro del autor, ni conozco su experiencia en el mundo de las letras. Confío en que las críticas, buenas y malas, pues todas sirven, le sean de utilidad para futuros libros. No quisiera que ésta se considerara una crítica mala, sino simplemente una crítica. De todas maneras hay que tener en cuenta que yo no soy una experta en la materia y que los libros de zombis, salvo raras excepciones, no son mi fuerte, por lo que espero que no se tome muy mal que no me haya parecido fabulosa.